Que las modas son cíclicas es un hecho del que seguro te has percatado más de una vez. Esa prenda que perteneció a tu madre y que ahora puedes ponerte sin miedo a desentonar con el resto del street style actual o esa foto de hace unos años que no te parece tan descabellada porque las prendas te suenan bastante en la actualidad. La ropa de moda para mujer va y viene, con pequeños ajustes estilísticos, pero siempre debes tener presente que no es buena idea deshacerse de algunas prendas por miedo a que queden obsoletas: con el tiempo, volverán a estar de moda, ¡seguro!
Especialízate en historia de la indumentaria a través de nuestro máster online en diseño de moda.
Índice de contenidos
Historia de la ropa de mujer
En general, se puede establecer una tendencia por década en cuanto a moda se refiere. Un estilo de ropa que varia entre décadas marcadas por un claro fin: la comodidad. Es decir, que si a comienzos del siglo XX los corsés marcaban de forma exagerada la silueta de las mujeres, en la década de los años 20 (los locos años 20) las prendas pasaron a estar sueltas para una mayor libertad del cuerpo femenino, sobre todo. Se trataba de la época del charlestón y a ella iba unida la diversión, por lo que los zapatos de tacón bajo y los vestidos sueltos eran la tónica que predominaba. Esta alternancia se repetirá a lo largo del siglo XX y hasta nuestros días.
Los años 30 son los que pusieron de moda el pantalón en la vestimenta de las mujeres para quedarse para siempre en nuestros armarios. Las siguientes dos décadas estuvieron marcadas por una vuelta a la feminidad a través de diseños que marcaban la ansiada ‘cintura de avispa’. Se veían en los vestidos de tonos pastel, de corte por debajo de la rodilla. A partir de ahí, y como ya había pasado, sería la historia y sus acontecimientos los que marcarían la evolución de las prendas.
Los movimientos sociales de los años 60 y 70 pusieron de manifiesto que era necesaria más libertad a la hora de vestir y salirse del “encorsetamiento” al que estaba sometido la moda femenina, sobre todo. Fueron años de minifaldas imposibles, de la explosión de color y de los pantalones acampanados.
Con los 80 llegó la rebeldía y la exageración, protagonizada por las muy visibles hombreras en todo tipo de prendas, las lentejuelas y la gran presencia del cuero. La música dejaría su huella particular en la moda de los 90, a través del llamado ‘estilo grunge‘. Vaqueros y camisetas predominaban en looks descuidados.
Estrenamos milenio con la llegada de los años 2000 y el culto a la cultura pop. Para muchos, junto con los horteras años 80, es una de las peores épocas para la moda. En los últimos años, vemos como un batiburrillo de todas estas tendencias pasadas se dan la mano en pasarelas y en la calle.
La ropa “de antes” que vuelve a ser tendencia
Hoy en día los pantalones acampanados han vuelto y eso se lo debemos a la herencia que han dejado los años 70. No hay ni qué decir que la gran presencia de colores también es abrumante, tanto como la que iba aparejada a la psicodelia de los años 60.
La comodidad caracteriza la ropa de moda para mujer, convirtiéndose en razón de ser de las tendencias actuales. Este modo de vestir se traduce en la gran presencia de pantalones boyfriend, que recuerdan a ese estilo noventero. Junto con ellos, la estética chándal también vuelve a imponerse, sobre todo en las generaciones más jóvenes. Acompañado de unos gustos musicales concretos y artistas que defienden esta tendencia en los escenarios (como ha pasado en muchas otras ocasiones con la moda del momento), la sudadera y el pantalón de deporte han trascendido barreras.
Y es que, ¿quién nos diría hace unos años que unas deportivas casarían tan bien con un vestido? Probablemente los gurús de la moda más atrevidos. Las deportivas han llegado para quedarse. Han tenido su protagonismo a lo largo de los años. Se han convertido en el mejor complemento en la ropa de moda de mujer. Sin embargo, ahora combinan otra tendencia de los 90, como eran los zapatos con plataforma. Las deportivas estilo marca Fila o las diseñadas por Balenciaga son las gran tendencia de la última temporada. Están preparadas para combinar con todo, luciendo suelas cada vez más exageradas.
Rasgos del pasado que caracterizan la ropa de moda actual
Y si esta tendencia parece que pretende volver más casual cualquier outfit, aportándole un toque desenfadado; por otra parte está la vuelta a los trajes de sastre de los 90. Estos combinan a la perfección con las deportivas comentadas anteriormente. De echo se convierten en el paradigma de que arreglado pero informal es posible. Lo cierto es que detrás de esta tendencia hay una revolución social. Esta tendencia está asociada a que las mujeres pueden ocupar puestos de responsabilidad y ello se ha traducido en una vestimenta más formal, tomando el traje por protagonista. Como otras veces en la historia, la moda se puede convertir en símbolo y abanderada de una situación concreta.
Volvemos un poco más atrás en el tiempo, hasta los años 80 para recordar otra moda que vuelve a ser tendencia. Hablamos de los pantalones de cuadros que podrás encontrar en todos los colores y variaciones. Desde pitillos más ajustados hasta sueltos, pasando por aquellos que incorporan un volante en la parte inferior.
Estilos y prendas que renacen
Pero este no es el único estampado que ha vuelto del pasado. Una de las claras tendencias que marcan la ropa de moda para mujer actualmente son los lunares. Los topos no son solo la parte fundamental de un traje tradicional andaluz. Han tomado relevancia en los últimos años y lo han hecho pisando fuerte. Renacen de las cenizas de los años 80, sobre todo en blanco y negro, que siguen siendo una opción acertada.
Y si retrocedemos una década más, hasta los 70, no te resultarán raras aquellas mallas de lycra, los llamados spandex. En función del color elegido pueden ser una apuesta más que arriesgada para tu outfit.
Como ves, la moda vuelve una y otra vez a tu armario aunque no lo quieras, con diferentes formas y colores, pero con una esencia que permanece. No pierdas la oportunidad de marcar tu propio estilo. Combina prendas de diferentes épocas para crear tus propias tendencias. No olvides que muchos diseñadores se basan en el street style para inspirarse en las que después serán las creaciones de la temporada.